Innovación y sostenibilidad en la construcción de edificios

7 febrero, 2024
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Europa se encuentra en una encrucijada energética, donde los edificios desempeñan un papel fundamental, representando el 40% del consumo total de energía en el continente. Sin embargo, en España, el país se sitúa por debajo de la media europea, con un 31%, según datos proporcionados por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE). Las nuevas tecnologías, las tendencias y los marcos legislativos están cambiando el panorama energético permitiendo mayor innovación y sostenibilidad en la construcción de edificios.

Uso eficiente de la producción renovable

La Unión Europea aspira a alcanzar el 42.5% de energía renovable para 2030, pero actualmente solo supera el 20%. Para alcanzar este porcentaje, los programas legislativos han acelerado la necesidad de mejorar la eficiencia de los edificios. La clave radica en la capacidad que tienen para generar su propia energía renovable mediante sistemas de gestión y almacenamiento de energía con baterías. La implementación de estas tecnologías no solo contribuirá a la sostenibilidad, sino que también permitirá el uso óptimo de la energía producida, marcando un hito en el camino hacia el objetivo del 2030.

Las empresas visionarias están invirtiendo en hardware y software para gestionar esta energía. Este enfoque revoluciona la toma de decisiones instantáneas y calculadas a través de algoritmos, mejorando los resultados y reduciendo costes. La apuesta por la energía inteligente se posiciona como un pilar esencial para impulsar la eficiencia en el uso de los recursos energéticos disponibles.

Además, existe una problemática con el 75% de los edificios de la Unión Europea que desperdician energía. Es necesario realizar una mejora del aislamiento y de los sistemas de calefacción creando planes nacionales de renovación de edificios para contribuir a la descarbonización.

Carga de vehículos y economía circular

A medida que los vehículos eléctricos ganan terreno, es esencial equipar los edificios con las infraestructuras necesarias para que haya estaciones de carga. Para 2024, se prevé un aumento significativo en la instalación de cargadores no solo en hogares, sino también en edificios comerciales. Esta iniciativa no solo busca facilitar la carga para clientes y personal, sino que también contribuye a reducir las emisiones de carbono derivadas de las flotas de vehículos tradicionales.

El hecho de que la energía renovable sea inagotable, no implica que los materiales necesarios para construir tecnologías sostenibles pueden agotarse. Por eso las políticas instan al sector de la construcción a abrazar la economía circular, buscando maneras de mejorar la longevidad, durabilidad y adaptabilidad de los edificios. La reutilización de productos y materiales se convierte en una pieza clave para garantizar una transición energética sostenible y consciente de los recursos.

En conclusión, el panorama energético europeo está experimentando una transformación hacia la sostenibilidad, donde la innovación en la producción de energía, el uso inteligente de recursos y la adopción de prácticas circulares se perfilan como pilares fundamentales. La transición energética no solo se trata de generar energía limpia, sino también de replantear la forma en que construimos y utilizamos nuestros edificios en aras de un futuro más sostenible.